Trivialeando

Todos aquellos que han pasado por mi casa saben que soy un poco desastrito con el orden. Desastrosamente desordenada, dirían algunos. Nunca encuentro nada, ni recuerdo dónde lo dejé. Y lo más probable es que aquello que dejé nunca reaparezca.

¡Pero no ha sido así con las frases del trivial! jejejejejeje Bueno, reconozco que aparecieron un día simplemente buscando los papeles del médico. Y es lo que tiene, cuando buscas una cosa, aparece otra que habías buscado hace tiempo, pero que no habías encontrado. Y lo que buscas, por supuesto, no lo encuentras.

Así que... ¡qué mejor oportunidad de actualizar que recordando algunas de las famosas frases del trivial! :P Hay que poner en situación, antes que nada. Tuvimos la genial idea de organizar un trivial mezclando preguntas de varios trivial frikis que teníamos. El trivial de El Señor de los Anillos (cómo no!), el trivial de Marvel (cómo librarse!), un trivial de cine (chungo pero muy chungo!) y el trivial tradicional (menos mal que existe!). Aquél día nuestro nivel de frikismo subió como la espuma, y eso que ya es bastante alto. Que se lo digan a Tas que ha llegado a sacar Gran Friki en el Frikitest XDDDDDD

Para empezar, era un poco lío, porque los colores de las preguntas eran diferentes en el tablero y en los distintos trivial. Lo que nos llevó, junto al daltonismo propio de algún jugador, a diferentes discusiones de lo más transcendentales.

Sobre los colores:

Carlos (en una respuesta a alguna pregunta que no recuerdo): "El camaleón que se parece al Duende Verde"
Alvaro: "¿Se parece?"
Carlos: "Son verdes"
Alvaro: "Depende de donde pongas al camaleón"
Carlos: "Pero normalmente es verde"
Alvaro: "Sobre todo si lo pones encima del Dueden Verde"
O_O

Sí, una discusión de lo más filosófica. Pero no nos libramos de los colores no. Al de un rato:

Carlos (con mirada asombrada): "Ahora el azul es verde"
Tas: "Eso me pasa a mí a veces"
Faltó añadir "Soy daltónico, y que?" XDDDDDD

Alvaro: "Aquí no hay rosa, por lo que mi marrón es el rosa y mi rojo es el rosa"
Momentos más tarde...
Alvaro: "Marrón! Aquí no hay rosa, así que sería el marrón"
Carlos (en el momento anterior estaba en sus mundos de Yupi): "El morado es marrón"
Alvaro: "¿El naranja es el marrón?"
Elen: "El amarillo... el amarillo..."
Indil: "¿Cual era el color?"
Todos (menos Tas, que en temas de colores no se mete): "El rosa"
Indil: "Ah, el rojo o el violeta entonces"

Tirar los dados tampoco es una tarea fácil a veces. Sobre todo cuando tus compañeros de juego ponen a tu alcance trampas y subterfugios.

Tas: "¿Qué palabrita grita Aragorn cuando la primera escala Uruk Hai se apoya en el muro?"
Carlos: "Voy tirando"
Coge el Kiri y lo tira (el Kiri, para quien no lo sepa, es un quesito pequeño y cuadrado :P de los que se comen, claro jejejejeje Que nadie pregunte qué hacía ahí porque no lo sé XD)
Alvaro: "Te ha salido la vaca que rie..."

Y luego, están los duros de oido, y de entendederas. Y por supuesto, los que no les tienen paciencia.

Alvaro: "¿Qué nombre reciben las antiguas bahías cerradas al mar por cordones arenosos?"
Carlos: "¿Antiguas has dicho?"
Alvaro: "Sí, y bahías he dicho. Y también he dicho cerradas al mar y cordones arenosos"
Carlos: "¿Qué nombre reciben?"
Alvaro: "Sí, eso también" ¬¬
...
Elen: "¿Cuál era la pregunta"
....

Recurrir a los académicos no siempre resulta acertado. Sobre todo cuando se trata de colores.

Indil: "¿De qué color tienen los ojos los espectros de las Ciénagas de los Muertos?"
Elen: "Lechoso verdoso"
Indil: "Rosa, marrón, rojo, naranja... ¿eso es un color?¿lechoso verdoso?"
Elen: "La RAE lo acepta..."
Alvaro: "La RAE no está aquí..."
Respuesta: "Blanco"
¿?¿?

También hay preguntas, que dependiendo de su formulación, se caen por su propio peso:

Elen: "¿En qué película estaba Humphrey Bogart loco por el loro?"

Y las respuestas, a veces son impactantes como piedras:

Alvaro: "¿Grito de guerra de La Cosa?"
Carlos. "¡Estoy duro!"

O dudas existenciales a nivel político:

Carlos: "¿Puede votar Wonderwoman? digo, ¿Puede volar Wonderwoman?"

En fin, seguro que hubo más, pero se han perdido en la memoria, y también en mis archivos de notas. A saber qué habrá sido de esas perlas. Pero prometo guardar las siguientes como oro en paño. ¡Que no se diga!